En un partido reñido y con pocos puntos, los Bengals superaron 17-7 a los Giants en el cierre de la jornada dominical. Ambas ofensivas mostraron cierta ineficacia y fueron pequeños detalles los que inclinaron la balanza a favor de Cincinnati, que logró así su segunda victoria en lo que va de la temporada.
Los Bengals se adelantaron rápidamente
El encuentro, disputado en Nueva York, resultó ser inusual y careció de la explosividad anticipada. Los Bengals asumieron la delantera muy pronto, gracias a un acarreo de 47 yardas de Joe Burrow, una jugada que sorprendió no solo a la defensa de los Giants, sino a todos los presentes en el estadio.
Esa fue la única anotación en la primera mitad, y fue en el tercer cuarto cuando Nueva York logró sumar puntos en el marcador, con un acarreo de una yarda de Tyrone Tracy. Sin embargo, ante la escasa efectividad de los Giants, los Bengals aprovecharon para cerrar el partido después de la pausa de los dos minutos, con una carrera de 30 yardas de Chase Brown.
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A pesar de que Nueva York intentó intensificar el juego en los minutos finales, el pateador Greg Joseph falló en dos ocasiones con goles de campo, lo que frustró las posibilidades de los Giants de acortar distancias.
Daniel Jones tuvo una actuación discreta
El mariscal de campo de los Giants evidenció que la inconsistencia forma parte de su rendimiento. Cuando parecía que estaba comenzando a mostrar un buen nivel, Daniel Jones tuvo dificultades para avanzar, terminando con solo 205 yardas, sin touchdowns y una intercepción. Su mejor jugada fue una carrera que le permitió sumar 56 yardas en 11 acarreos.
Por su parte, Joe Burrow tampoco tuvo un partido sobresaliente, concluyendo con 208 yardas, sin touchdowns ni intercepciones. Al igual que Jones, su jugada más destacada fue la escapada que se tradujo en el primer touchdown para los Bengals.
