Durante el encuentro entre los Dolphins y los Jaguars, el receptor abierto de Miami, Tyreek Hill, sorprendió a todos los asistentes en el Hard Rock Stadium al simular un arresto junto a Jaylen Waddle durante la celebración de su touchdown.
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Esta peculiar acción se debió a que antes del juego, Hill fue arrestado por manejar a alta velocidad y, además, este lunes tuvo que presentarse en el Departamento de Policía por conducción temeraria y por una infracción del cinturón de seguridad.
A pesar de que la NFL implementa normas muy severas sobre la imagen que tienen los atletas como figuras públicas, Tyreek Hill no es el primer deportista que enfrenta problemas legales en Estados Unidos.
Tyreek Hill no es el primer jugador de la NFL que acaba detenido
En 2021, el deportista de los Raiders, Henry Ruggs III, fue arrestado por manejar bajo los efectos del alcohol a más de 250 kilómetros por hora en un Chevrolet Corvette. Este hecho ocasionó que chocara con otro vehículo conducido por una mujer y su perro, quienes lamentablemente perdieron la vida.
Dos años después, un juez dictó sentencia y condenó a Ruggs a pasar de tres a 10 años en prisión por los cargos de homicidio involuntario.
Michael Vick, la selección número uno del Draft de 2001 que terminó en prisión por peleas de perros
Michael Vick llegó a la NFL como una de las más grandes promesas, ya que en 2001 fue elegido como la selección número uno del Draft. Sin embargo, en abril de 2007, la policía descubrió un lugar destinado a peleas de perros, incautando 66 canes, de los cuales 55 eran pitbulls.
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Después de las declaraciones de testigos, la justicia halló a Vick culpable y lo condenó a 23 meses de cárcel, los cuales cumplió en la prisión federal de Leavenworth. Posteriormente, fue liberado en mayo de 2009 y continuó su carrera en la NFL, jugando siete temporadas más hasta que se retiró en 2015.
El caso de Aaron Hernández, el más impactante en la NFL
A pesar de convertirse en una de las figuras más ilusionantes de la NFL, en junio de 2013, Aaron Hernández fue detenido por su involucramiento en el homicidio de Odin Lloyd.
Posteriormente, el jugador se vio asociado a una serie de asesinatos en Florida y Massachusetts, y finalmente, tras dos años de juicio, fue sentenciado a cadena perpetua por el asesinato en primer grado de Lloyd. Dos años más tarde, mientras cumplía su condena en el centro penitenciario Souza Baranowski de Shirley, fue hallado colgado en su celda.
A diferencia de Tyreek Hill, Chad Ochocinco no logró evitar la prisión
Chad Johnson, conocido popularmente como Chad Ochocinco, fue condenado a 30 días de prisión después de darle una nalgada a su abogado durante la audiencia por violación de su libertad condicional tras un caso de violencia familiar.
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Antes de finalizar, Ochocinco celebró dando una palmada. Sin embargo, la jueza Kathleen McHugh se enfureció por el gesto y condenó a Chad a 30 días en prisión, aunque al final, el ex receptor de los Patriots y Bengals solo permaneció siete días tras las rejas.
Ray Rice, el ganador del Super Bowl que arruinó su carrera en la NFL
Durante la temporada 2014 de la NFL, el corredor de los Baltimore Ravens, Ray Rice, se vio envuelto en un escándalo tras agredir a su prometida en un elevador. La situación se intensificó debido a un video filtrado por TMZ. A pesar de ello, no llegó a pisar la cárcel, pero sí perdió su carrera profesional.
Después de una suspensión de un año, Rice intentó regresar, pero ningún equipo lo fichó y en 2018 anunció su retiro definitivo.